miércoles, 12 de noviembre de 2014

El Problema como Construcción Moral



EL PROBLEMA COMO CONSTRUCCIÓN MORAL
La moral es el conjunto de costumbres, creencias, valores y normas de una persona o grupo social determinado que ofician de guía para el obrar, vale decir, que orientan acerca del bien o del mal o bien, correcto o incorrecto de una acción. Los conceptos y creencias sobre moralidad son generalizadas y codificadas en una cultura o grupo y, por ende, sirven para regular el comportamiento de sus miembros. La conformidad con dichas codificaciones es también conocida como moral y la civilización depende del uso generalizado de la moral para su existencia.
LA DIMENSIÓN MORAL DEL SER HUMANO 
 Cuando nacemos, nuestra vida es como una página en blanco que está por escribir, lo que supone que cada uno de nosotros va a tener que construirse su propia existencia y su propia personalidad. La vida es, por tanto, un camino, en el que tendremos que diseñar nuestro estilo de vida personal. La construcción de ese camino, que es mi vida, se va realizando a través de los hechos que realizo y de las relaciones con los demás. Nuestra vida es el resultado de lo que hacemos, de nuestros actos, ellos definen lo que vamos siendo y hacia dónde vamos
Estos actos deben ser elegidos y decididos por cada uno de nosotros, elegir los objetivos que queremos alcanzar, buscar los medios adecuados para lograrlos, y es fundamental, en la medida de lo posible, tomar estas decisiones en libertad, intentando no ser condicionados, por ejemplo, por la publicidad de la televisión. Pues bien, dado que la vida es el resultado de los que vamos haciendo, empecemos por analizar el tipo de actos que realizamos cotidianamente para poder distinguir cuales son nuestros actos morales, muy importantes, porque son los que en mayor medida nos pueden conducir hacia una vida buena y feliz, que es el objetivo de esta materia nueva en la que te inicias, la Ética. A lo largo del día realizas muchas acciones diferentes. Así, respirar, es una acción que llevas a cabo de forma instintiva, sin pretenderlo, dar un paseo, es algo que realizas de forma consciente, sabiendo lo que haces y porque te apetece, dormir es algo que realizas de modo inconsciente, lo haces sin saber que lo estás haciendo, también puedes entrar en una tienda y robar un CD, aunque no lo haces, porque sabes que no debes hacerlo. ¿Qué diferencia hay entre las primeras acciones y la última?.
La Ética y la moral Las personas no sólo actuamos moralmente, sino que, también reflexionamos sobre nuestro comportamiento o el de los demás, como cuando nos preguntamos ¿debo hacer esto?, ¿he hecho lo correcto?, ¿es justo que…?, etc. Esta inquietud humana por esclarecer su propio comportamiento moral dio lugar a la Ética, una disciplina que nace en la Grecia Clásica en el s. IV a. C, formando parte de la Filosofía, un valioso saber que estudiaras en cursos posteriores. El vocablo Ética viene del griego êthos, que significa “costumbre” o hábito y “carácter” o modo de ser, al igual que el término “moral” en latín, pero aunque coincidan en este aspecto, vamos a considerar a lo largo de este curso a la Ética como el estudio filosófico de la conducta moral, en general, diferenciándola de otros tipos de conducta. Veamos, otros saberes, la Historia por ejemplo, nos dice cómo son los hechos humanos, la Ética, sin embargo, nos dice cómo deben ser; así mismo, estudia los valores y las normas morales, determina en qué consiste la responsabilidad moral, investiga si existe libertad en la conducta humana, analizar la obligación moral interrogando ¿qué debo hacer? ¿por qué?, ¿cómo son los seres humanos, egoístas o generosos?, ¿son mejores unas personas que otras, o todas tienen la misma capacidad para se buenas? ¿porqué debería ser yo una buena persona?, etc.
LOS VALORES MORALES : Como ya hemos visto, a la hora de actuar elegimos y decidimos qué vamos a hacer. Ésta elección, no la realizamos al azar, recordemos que nos caracterizamos ser racionales. Si tenemos varias posibilidades, nos inclinamos por aquella que preferimos porque tiene “algo” que la hace más estimable que las otras opciones, ese algo es su valor, por ejemplo, la generosidad de un amigo, la belleza de un cuadro, la utilidad de un bolígrafo, etc. Vemos que hay diferentes clases de valores (económicos, estéticos, religiosos, morales o éticos, etc.) pero todos ellos se caracterizan por o ser cualidades especiales que están en los objetos, en las personas o en las acciones, o y sólo los seres humanos somos capaces de valorar esas cualidades. Podemos decir que estamos ante valores morales cuando: o necesariamente deben ser apreciados y respetados o son universales, es decir, válidos para todos los individuos sin excepción o y, además, los apreciamos por sí mismos, no porque nos reporten algún beneficio egoísta, estando condicionados por intereses sociales, políticos Por ejemplo, la justicia, la generosidad, la honradez, la sinceridad, la dignidad, la igualdad, etc. son valores que podemos considerar universales, en el sentido de deseables y respetables por todos, es más, que necesariamente deberían ser estimados, y que su validez no estuviese condicionada ni por las épocas históricas o los intereses particulares, etc.

EL PODER MORAL
 El Poder Moral encaja dentro de este tipo de cuestiones. ¿Quién decide lo que es bueno, lo que es moral, lo que es el súmmum bonumde una sociedad como para establecer un poder público que lo defienda y tutele? Para quien ama la naturaleza, el súmmum bonumde será escalar el Ávila. Para quien ama el dinero, un mercado abierto con reglas de juego que le permitan hacerse rico. Para quien ama el estudio, un sistema educativo que le permita formarse a plenitud. Para quien ama la trascendencia, un espacio político tolerante donde buscar una conexión con lo que considera la divinidad. Es imposible que un Estado pueda discernir sobre estos temas. Es antidemocrático. El Estado debe tener una constitución liberal que permita que sea el debate interno el que decida cuál es el súmmum bonumde de cada quien, y que no haya que establecerlo en las leyes, como en el comunismo, donde era obligatorio y moral creer en el colectivismo, condenar la libre empresa y ser ateo, o te fusilaban.
PROBLEMAS ÉTICOS - PROBLEMA DEL DEBER SER
La ética tiene por objeto de estudio la conducta moral de los hombres histórica y socialmente considerada. El término ética se deriva de la palabra griega ethos, que quiere decir lugar habitado por hombres y animales. “La acepción más conocida y difundida del vocablo ethos se presenta a partir de Aristóteles, ligado a un conocimiento llamado precisamente ética. Según esta acepción, ethos significa temperamento, carácter, hábito, modo de ser. De acuerdo con el significado etimológico, ética sería una teoría o un tratado de los hábitos y las costumbres.” Ahora bien, la ética entendida como ciencia o teoría cuyo objeto de estudio es ala moral, plantea problemas concernientes a la relación que guarda la libertad con la moral, la diferencia que existe entre el aspecto normativo y el fáctico, el carácter histórico de la moral, la diferencia entre las normas morales y las normas jurídicas, entre otros problemas. Recordemos de manera rápida que la moral (del latín mos=costumbre) como conjunto de reglas adquiridas por hábito no se desligan, en la filosofía de Platón y en Aristóteles, del ámbito social y político. Según Aristóteles la virtud no es algo que se imponga desde el exterior al individuo, sino una disposición a obrar de manera deliberada, la cuál está racionalmente determinada tal como la determinaría el hombre prudente. Para Aristóteles la virtud, la felicidad y el bien moral en general, sólo se realizan en plenitud si al hombre se le concibe en relación y en armonía con la sociedad. El hombre separado de la sociedad, dice Aristóteles, sería un dios o una bestia.
Emmanuel Kant formula una ética o moral autónoma. Según Kant el deber moral proviene de la voluntad o del hombre mismo. En este sentido, la responsabilidad moral se sitúa en la conciencia del sujeto, quién se da a sí mismo la ley moral que debe cumplir. El problema del deber ser se refiere a los actos que realiza el individuo con respecto a normas morales o individuales. A lo largo de la historia, el Hombre se ha preguntado a si mismo: ¿Qué debo hacer? ¿Qué no debo hacer? ¿Qué puedo hacer o dejar de hacer? Y en esa conducta del hombre se juega la libertad, la responsabilidad y la conciencia morales. Por ejemplo, resulta curioso constatar que, en ocasiones, cuando quieres, no debes; y al revés, cuando debes, no siempre quieres. Debes ir a la escuela, pero no quieres, o no siempre quieres, debes estudiar y hacerla tarea, pero no quieres. Ante estas contradicciones, lo que se debe hacer es elegir. Por otra parte, es importantísima la acción del Hombre, puedes esa ahí, donde uno se construye a sí mismo. ¿Cómo actuar? ¿Soy libre o estoy obligado con algunas acciones? ¿Quién pone las reglas de conducta moral? ¿Son las mejores? ¿Se pueden cambiar? El problema del deber ser nos lleva a tomar conciencia de nuestra conducta; y donde se actuaba por actuar, ahora se actúa conscientemente, dirigiendo la acción hacia la propia superación.

No hay comentarios:

Publicar un comentario